Aikido complemento de salud
¿Alguna vez ha escuchado la palabra Aikido?, ¿sabe cuál es su significado?, ¿conoce que en Cuba se utiliza esta nueva modalidad con un fin terapéutico?. Son preguntas que nos vienen a la mente cuando hacemos alusión a este término, que poco a poco se ha extendido por todo el mundo.
Aikido es un arte marcial japonés creado por Morihei Ueshiba, quien provenía de una familia de samurais campesinos. Si lo dividimos en sílabas, encontramos el significado de cada una: Ai (unión, armonía), Ki (espíritu o fuerza), Do (senda o camino), o sea, camino hacia la armonía.
Se caracteriza por poseer un estilo muy caballeroso y enfatiza en la unión del ser humano. La Organización de las Naciones Unidas lo calificó como el arte de la paz y se basa en la economía de movimientos, los cuales son muy efectivos dando al individuo que lo practica la habilidad de conocerse a sí mismo, como además de saber las intenciones de su atacante.
Hoy en día, el Aikido es muy popular gracias a las demostraciones que ha hecho el actor norteamericano Steven Seagal en sus películas, siendo un maestro de alto rango en dicha expresión.
Cuba tampoco es ajena al impacto de esta disciplina defensiva. El Doctor Jorge Bruno González Hess, especialista en neurocirugía del Hospital General Clínico-Quirúrgico Docente “Ernesto Guevara de la Serna”, y presidente de la Federación Cubana de Aikido en Las Tunas, concibió la idea de utilizar este arte marcial en la terapia de rehabilitación.
“Yo me basé en el principio filosófico de que el equilibrio espíritu-mente-cuerpo nos hace ver a la persona desde un punto de vista holístico y no desde el punto de una enfermedad o un pensamiento, sino como un todo; de modo que en el adulto mayor un sistema de ejercicios bioenergéticos podía ser factible, ya que en otras artes como el wushu y el yoga se han palpado buenos resultados en la salud de la persona”.
Sin buscar la espectacularidad, organizó un proyecto conjunto con la Delegación Provincial del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), para desarrollar la aikidoterapia con adultos de la tercera edad.
“En Cuba no ha existido experiencia sobre este tema, y fue en el año 1999 que comencé a estudiar el Síndrome del Túnel Carpiano, que afecta la función motora de las manos y miembros superiores. La experiencia consistía en que yo operaba a mis pacientes y los rehabilitaba con un sistema de ejercicios que normalmente se utilizan para el calentamiento antes de cada entrenamiento. Nos dimos cuenta que los ejercicios podían ser aplicados en el tratamiento del Síndrome del Túnel Carpiano Ligero y apreciamos mejorías en un grupo de pacientes, que no requirieron cirugía”.
“El estudio se compuso de 85 manos operadas y rehabilitadas con la nueva técnica y 85 operadas sin rehabilitación por este medio, donde los resultados fueron favorables para los que practicaron aikidoterapia, mejorando los síntomas precozmente en un 97 por ciento de los pacientes en 2 meses y medio, logrando la incorporación al trabajo de los que estaban en edad laboral en un 96 por ciento en menos de 2 meses, por encima de la terapia de rehabilitación normal, que solo logró un 40 por ciento de los incorporados a sus labores.”
La práctica de la aikidoterapia ha demostrado ser útil en enfermedades crónicas no trasmisibles, incluyendo la aplicación como profilaxis y el mejoramiento de la calidad de vida del adulto mayor.
Por el alcance de esta modalidad, se logra vincular un proyecto de la rama deportiva con uno de humanidades como es el caso de la aikidoterapia y FiloArtMed, este último dirigido por la profesora de Filosofía María Elena de Prada, de la Facultad de Ciencias Médicas “Doctor Zoilo Marinello”.
Para esta especialista el impacto radica en que “permite ver la cultura física como un fenómeno psicosocial, o sea el mundo social y psicológico de cada paciente, sumándole también la inyección del sentido de la vida. Optimista asegura que "el aikido es un arte marcial que tiene como filosofía la armonía con el medio y la paz interior, para poder estar en sincronía con el oponente y con el universo. Es importante la práctica de este arte marcial en los adultos de la tercera edad, no solo por la terapia de rehabilitación física, sino también por la recuperación del sentido de la vida, porque los hace sentirse útiles y su concepto de la vida cambia notablemente.”
Entonces, queda demostrado con esta experiencia tunera que el aikido es una concepción de la vida que lo complementa como una técnica eficaz para prolongar la salud del hombre, y por ende lograr el camino hacia la armonía.